Después de muchiiisimo tiempo, una receta deliciosa para este fin de semana de otoño.
Mi prima Maribel , en las reuniones familiares, llevaba a veces una tarta de solo chocolate de la que siempre me han hablado y nunca he probado.
Debe ser un manjar de dioses, para que todos y todas se la coman y digan lo deliciosa que está. Y digo esto porque a mi familia, excepto a dos ó tres personas contadas, no les gusta el chocolate.
En fin, tarta por allí, tarta por allá...consiguió la receta! Y aquí está!
Ingredientes
- 150 grs de mantequilla
- 150 grs de chocolate de derretir
- 3 cucharadas de azúcar
- 1 cucharada y 1/2 de harina
- 3 huevos
Muy fácil de hacer, y aún más fácil de comer!
Muy fácil de hacer, y aún más fácil de comer!
Comenzamos montando las claras a punto de nieve
Ponemos en un cazo a derretir el chocolate, la mantequilla, poco a poco el harina sin dejar grumos, y vamos mezclando bien para que todo se vuelva una pasta uniforme.
Apartamos del fuego y mezclamos con las yemas moviendo enérgicamente para que no se cuajen.
Mezclamos todo con las claras con movimientos envolventes.
Horneamos con el horno caliente previamente, durante 15 minutos a 180º.
Otra forma de mezclar los ingredientes, diferente a la original, pero que creo que os va a quedar mejor: una vez montadas las claras y derretido el chocolate con la mantequilla, mezclamos las yemas batidas con el azúcar, con las claras. Eso sí, como siempre, con espátula y movimientos envolventes.
Y una vez está realizada esta mezcla, vamos añadiendo el harina y el chocolate poco a poco y envolviendo bien con la espátula.
El horneado, el mismo.
Dejamos enfriar y a comer. Yo recomiendo que esté a temperatura ambiente.
Podemos echar cobertura de chocolate también...a mí ya me daba vergüenza y remordimiento.
